Artículo de opinión: Pautas para el suministro de sillas de ruedas
Artículo: Paula Martínez, Asesora Clínica de Rehagirona.
La Organización Mundial de la Salud junto a la sociedad internacional de profesionales de sillas de ruedas han creado una guía con las directrices para la correcta elección de una silla de ruedas: Wheelchair provision guidelines 2023. Se tienen en cuenta todos los factores involucrados en la elección de la misma: políticos, socioeconómicos, personales, físicos o emocionales.
La motivación de este artículo reside en que la silla de ruedas constituye el medio de transporte, de comunicación, de aprendizaje y de expresión de todas las personas que la necesitan y utilizan en su día a día, por ello es de vital importancia conocer qué factores hay que tener en cuenta para una correcta elección de las mismas.
En la primera parte de esta guía se describen los cuatro principios que sustentan el proyecto como son el derecho a la movilidad, la cobertura sanitaria universal, la equidad de derechos y el enfoque centrado en las personas.
A continuación, se pone de manifiesto el gran porcentaje a nivel mundial de personas que necesitan silla de ruedas y los beneficios que suponen siempre que, el proceso para obtenerla se encuentre debidamente regulado. Lo que significa que la elección de la silla y su proceso de posicionamiento abarca las necesidades tanto del usuario, como familiar, social y de su entorno. Asimismo, se exponen las principales barreras para que dicho proceso se lleve a cabo de la manera correcta, como son la falta de legislación, carencias económicas, sociales y culturales y falta de cooperación.
En tercer lugar, presentan una serie de directrices para garantizar el éxito en el posicionamiento del usuario en la silla de ruedas. Se trata de los siguientes: individualización en la elección de cada silla al usuario, adaptación de la misma en base a las necesidades y características, adecuada formación del profesional que va a orientar al sujeto durante todo el proceso para obtener el máximo rendimiento de la silla y por último, un correcto y continuo seguimiento.
Finaliza el artículo haciendo referencia a las futuras líneas de trabajo que deben abordarse. Encontramos el fortalecimiento de las políticas pertinentes, elaboración de protocolos universales, desarrollar un marco de competencias que cubra las diferentes funciones del sistema de servicios y proporcionar normas de calidad y seguridad en todos los niveles del proceso.
En conclusión, proporcionar una correcta accesibilidad a las sillas de ruedas en la sociedad es clave para que se cumplan los Derechos Declarados en la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y para cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible.
Destacamos que el acceso a una silla de ruedas acompañado de una correcta valoración, adaptación y seguimiento es un derecho humano, por lo que es vital alcanzar una cobertura sanitaria universal que lo contemple.
Es importante hacer especial hincapié en la recopilación de datos y evaluación de los procesos para mejorar la oferta y servicios actuales para ajustarnos a las demandas por parte de los usuarios, de sus familias, profesionales y entorno. Pues, cualquier intervención ha de partir del objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas.
Artículo: Paula Martínez, Asesora Clínica de Rehagirona.
